Rehabilitar vivienda antigua

Rehabilitar una vivienda antigua es la mejor manera de conseguir que un inmueble que ya tiene una larga historia cumpla las condiciones necesarias para convertirse en un hogar del siglo XXI, pero sin perder ese encanto que le confiere el hecho de ser una casa construida muchos años atrás.

¿En qué consiste la rehabilitación de una vivienda antigua?

Rehabilitar vivienda antigua

A través de la rehabilitación lo que se busca es restaurar, renovar y modernizar una edificación ya existente, mejorando tanto su calidad como su funcionalidad. En función de cuál sea su estado y de cuál sea el resultado perseguido, habrá que hacer unas u otras intervenciones.

La restauración de elementos originales como las fachadas o las molduras es esencial para conservar el valor histórico de la vivienda y su estética; pero también hay que llevar a cabo obras de entidad que implican, por ejemplo, cambios en la distribución interna o una mejora de la eficiencia energética mediante el uso de materiales de aislamiento de última generación.

La rehabilitación de viviendas antiguas es importante porque ayuda a conservar el patrimonio cultural e histórico de una región, a la vez que mejora la calidad de vida de los habitantes del inmueble.

Pasos clave para afrontar la rehabilitación de una vivienda antigua

Para conseguir buenos resultados hay una serie de pasos que no hay que saltarse:

Análisis del estado de la vivienda

Muchas viviendas antiguas se pueden restaurar, pero otras no. Por eso, lo primero que hay que hacer es analizar con detenimiento el estado estructural y funcional de la vivienda, para detectar posibles daños que puedan afectar al proyecto.

Además, es esencial estar al tanto del estado legal de la vivienda para tener la seguridad de no que surgirán problemas con la propiedad.

Definir el alcance

Teniendo claro el punto de partida, se toman decisiones sobre el alcance que tendrá la reforma. Por ejemplo, si será integral y afectará, por tanto, a todo el inmueble, o si va a ser una reforma parcial que se centrará en determinados elementos estructurales o en estancias concretas.

En este punto también hay que decidir si se desea realizar algún cambio estructural o modificar la distribución de los espacios. Porque este tipo de ajustes de entidad afectan tanto a la planificación como al presupuesto.

Establecer el presupuesto

El presupuesto debe ser realista y ajustado a la magnitud de la reforma o rehabilitación que se quiere llevar a cabo.

A la hora de establecer la partida de gasto se aconseja reservar algo de dinero para hacer frente a imprevistos, ya que es habitual que en las obras surjan gastos extraordinarios que no estaban previstos inicialmente.

Contratar a personal cualificado

Rehabilitar una vivienda antigua requiere todavía más atención y cuidado que una reforma al uso. Por eso, es importante dejar esta tarea en manos de profesionales que sean capaces de diseñar y ejecutar el proyecto con la máxima calidad.

Eficiencia energética en las casas antiguas

El aislamiento y el ahorro de energía no han sido una prioridad en la construcción hasta hace relativamente poco, de ahí que las viviendas antiguas no sean precisamente eficientes desde el punto de vista energético. Por eso, esta es una de las cuestiones más importantes a trabajar en la labor de rehabilitación.

El aislamiento es esencial para reducir la pérdida de calor en invierno y la ganancia de calor en verano, y se puede mejorar de varias maneras:

  • Aislamiento de paredes. Inyectando el material aislante en las cámaras de aire de las paredes o instalando paneles aislantes en las paredes interiores o exteriores.
  • Aislamiento de techo. Al trabajar en la reforma del tejado se puede añadir aislamiento, o incluso crear un falso techo.
  • Aislamiento de suelos. Si hay que levantar todo el suelo, se puede valorar la instalación de un sistema de climatización de suelo radiante con su correspondiente aislamiento.

Las ventanas y puertas son una fuente importante de pérdidas de calor, y lo que se aconseja en estos casos es cambiarlas por modelos más eficientes en materiales con mayor capacidad de aislamiento.

Dado que los sistemas de climatización antiguos (en caso de haberlos) son bastante ineficientes, es interesante valorar la posibilidad de actualizarlos por otros modelos más eficientes como las bombas de calor o los sistemas de climatización zonificada. Además, se pueden combinar con instalaciones de energías renovables como los paneles solares o la aerotermia.

Es cierto que algunas casas antiguas están sometidas a restricciones en cuanto a las modificaciones estéticas que se pueden realizar en ellas, pero hay muchos sistemas y materiales que permiten mejorar la eficiencia sin necesidad de alterar la estética de la fachada.

Ayudas y subvenciones para la rehabilitación de viviendas antiguas en España

A través de los fondos Next Generation EU se ha puesto en marcha el programa de rehabilitación residencial que forma parte del Plan de Recuperación, Transformación y Resiliencia, dotado con 3.420 millones de euros.

El objetivo es financiar actuaciones de renovación y mejora acreditada de la eficiencia energética de edificios residenciales y viviendas. Para lo que se ofrecen ayudas de entre el 40% y el 80% del coste de la reforma.

Entre las mejoras que se pueden llevar a cabo y sufragar con esta subvención destacan:

  • Aislamiento térmico y acústico.
  • Sustitución de ventanas y carpinterías.
  • Instalaciones de sistemas solares o fotovoltaicos.
  • Mejoras en accesibilidad.
  • Sistemas de aerotermia.
  • Digitalización de las viviendas para mejorar la gestión y control energético.

Además de las ayudas estatales, suelen existir subvenciones autonómicas, por lo que se recomienda consultar si hay algún plan en marcha en la zona en la que se va a llevar a cabo la obra.

Rehabilitar una vivienda antigua es un proyecto delicado que requiere de atención especializada. Si quieres contar con los mejores especialistas en esta materia, ponte en contacto con Obras Gallaecia.