La reparación de naves industriales es un trabajo bastante común, ya que sufren mucho por dentro, en especial si hay máquinas que hacen que el ambiente sea húmedo, caluroso o muy frío.
Además, por fuera, la gran mayoría están expuestas a las inclemencias del tiempo. Temperaturas muy bajas, heladas, humedad alta mezclada con la sal o un calor muy fuerte con una insolación elevada, hacen que los exteriores se deterioren bastante.
¿Cómo realizar correctamente el mantenimiento de una nave industrial?
Para hacer el mantenimiento adecuado de las naves industriales, hay que tener en cuenta que hay dos tipos de medidas que hay que llevar a cabo: las actuaciones preventivas y las correctivas.
No hay que olvidar tampoco los trabajos de limpieza, que, aunque no se deberían incluir en ninguna de las dos categorías, sí que son importantes para que la nave esté en perfectas condiciones.
Mantenimiento preventivo
Con estas medidas, se consigue que no aparezcan problemas graves, los cuales son difíciles de solucionar por la urgencia y el coste.
Se trata de trabajos como la limpieza de los canalones, al menos una vez al año, con el fin de que no se desborden por la suciedad y creen goteras, o repasar la capa de pintura impermeable que consigue que el agua no se filtre por el tejado. También se revisan los vallados y se arreglan, se limpian, quitando la maleza para que un hipotético incendio no se propague, se llama a un electricista para que repase la instalación eléctrica, etc.
Nunca hay que dejar de lado la estructura, como las vigas que sujetan el techo o los pilares que sostienen la nave, que suelen estar expuestos y pueden sufrir algún golpe de máquinas como los toros o las carretillas elevadoras.
En definitiva, se trata de hacer una revisión a todo aquello que sabemos que se va a estropear con el paso del tiempo, adelantándonos a ello.
Mantenimiento correctivo
Aquí se realizan intervenciones que podemos denominar como “de urgencia”, situaciones que se pueden dar a pesar de que el mantenimiento preventivo sea el adecuado.
Por ejemplo, viene una tormenta, el viento levanta una parte del tejado y hay que colocar unas chapas nuevas; o un trabajador se ha descuidado y ha golpeado una puerta con una transpaleta, abollándola e impidiendo que cierre.
Es necesaria una limpieza regular
Una nave se ensucia mucho, a no ser que haya un servicio de limpieza regular que se encargue de estas tareas a diario.
Son entornos en los que suele haber mucho polvo, que, si no se quita, las máquinas de todo tipo se encargan de remover, acabando en los pulmones de los empleados. Tener un espacio limpio y desinfectado ayuda a que los trabajadores estén más a gusto. Su salud será mejor y eso se notará en la manera en la que llevan a cabo sus tareas.
Además, estas empresas contribuyen a un mantenimiento adecuado de las instalaciones, impidiendo que los suelos se deterioren si hay vertidos, incluso avisando de fugas de agua, de la aparición de humedades, etc.
¿Cuándo es necesaria la reparación de naves industriales?
La reparación de las naves es necesaria siempre que se detecte alguna rotura por mínima que sea, ya que, de esta manera, todo se quedará en una anécdota y se podrá solucionar por un coste bajo, o al menos razonable.
Algunas situaciones que pueden hacer necesaria una reparación son los problemas en los sistemas eléctricos, los de climatización, fontanería, los del tejado o los estructurales.
Así, una pequeña fuga de agua en los servicios la puede arreglar un fontanero si se ataja a tiempo, mientras que, si la dejamos pasar, es posible que llegue a provocar que un techo se caiga o que incluso el agua alcance la zona de producción.
De esta manera, en cuanto alguno de los responsables o de los empleados comunique que algo no funciona bien, o que se ha roto, lo mejor es actuar de inmediato y proceder con la reparación.
¿Por qué es importante la reparación de naves industriales?
El funcionamiento de la nave industrial y de la producción dependen de un buen mantenimiento. Sin él, la actividad diaria de la empresa no se puede realizar de una manera correcta.
No hay que olvidar que un mantenimiento deficiente, que por ejemplo lleve a que existan goteras en las zonas en las que están las máquinas, puede ocasionar una parada de la producción, lo cual es catastrófico en términos económicos.
Del mismo modo, no reparar las naves cuando toca, hace que la avería o el desperfecto se haga más y más grande, por lo que el resultado final será el tener que afrontar una inversión que puede llegar a poner en peligro la viabilidad de la empresa.
Tampoco debemos olvidar la imagen que una nave industrial sin mantener da tanto a los clientes como a los proveedores o al personal. No aporta una buena impresión del negocio ni de sus dueños.
En Obras Gallaecia podemos encargarnos de la reparación de naves industriales
En Obras Gallaecia ofrecemos servicios como la construcción de naves industriales en Galicia y también nos encargamos su mantenimiento. Con este formulario de contacto puedes pedirnos información si necesitas que nos encarguemos del mantenimiento o reparación de una nave industrial.
Además, también nos encargamos de construir viviendas pasivas, rehabilitamos todo tipo de edificios (hemos trabajado en muchas edificaciones históricas gallegas) y nos encargaremos de todo, desde el proyecto hasta la conservación de la vivienda durante el periodo de garantía.
La reparación de naves industriales es algo imprescindible para su funcionamiento, especialmente, cuando dentro se desarrollan actividades que no son las mejores a la hora de conservarlas en perfecto estado. Por eso, hacer un mantenimiento preventivo es fundamental, pues ahorrará problemas en el futuro.
